Opinión | A FONDO

Más Europa

Hace algo más de tres años, tomé posesión del cargo de representante del Estado español en el Congreso de Poderes Locales y Regionales (CPLR) del Consejo de Europa. Designado por la Federación Española de Municipios y Provincias, tuve el honor de presidir de forma histórica la delegación española ante este importante organismo internacional.

Un organismo creado en el año 1994 para llevar la voz del municipalismo, de nuestros pueblos y regiones, hasta el Consejo de Europa, la primera institución europea, con sede en Estrasburgo, surgida tras la Segunda Guerra Mundial con la vocación de sustituir la confrontación por la cooperación y contribuir a construir un mundo en paz. Todavía hoy, el Consejo de Europa, y con él, el Congreso de Poderes Locales y Regionales, sigue siendo uno de los principales garantes de los valores democráticos de nuestro continente.

Han sido años difíciles, pues la delegación española que he tenido el honor de presidir estos tres años tuvo que iniciar el trabajo on line a consecuencia de las restricciones por la pandemia del covid-19 y no pudimos acudir a la sede del Consejo de Europa, en Estrasburgo, hasta finales de 2021. Hoy, puedo decir que ha sido una experiencia inolvidable, de la que me siento tremendamente orgulloso.

Muchas han sido las propuestas y debates internacionales que hemos celebrado en el marco de este importantísimo organismo internacional, que han contribuido a fortalecer los valores democráticos y del municipalismo en Europa. Compartir problemas comunes, retos y oportunidades con los alcaldes y alcaldesas y representantes de las regiones de los 46 estados que forman parte del CPLR ha sido enriquecedor.

La pandemia

He vivido momentos históricos de lucha común contra la pandemia o contra los efectos de la lamentable guerra rusa contra Ucrania, que motivó la expulsión de Rusia del Consejo de Europa en el año 2022. Participé en el monitoring que el Consejo de Europa realizó a España en cuanto al cumplimiento de la Carta Europea de Autonomía Local. Hemos debatido y contribuido, a través de nuestro trabajo en el CPLR, a iniciativas comunes en Europa sobre el cambio climático, la participación ciudadana, la lucha contra los delitos de odio, la sostenibilidad, las políticas de juventud, la gestión de la emigración, de las personas refugiadas…

El pasado mes de enero presenté escrito de renuncia. He seguido presidiendo la delegación española en funciones hasta que han tomado posesión los nuevos miembros elegidos por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para esta nueva etapa: la presidenta de la FEMP y alcaldesa de Jerez de la Frontera (Cádiz), María José García-Pelayo; la alcaldesa de València, María José Catalá; el alcalde de Badalona (Barcelona), Xavier García Albiol; la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca; el alcalde de Soria, Carlos Martínez; y el alcalde de Fuenlabrada (Madrid), Francisco Javier Ayala. A todos ellos quiero felicitarles y desearles lo mejor en su nueva tarea en un organismo tan importante para afrontar los retos del siglo XXI, en un mundo más globalizado que nunca. Un mundo en el que necesitamos más Europa que nunca y más municipalismo que nunca.

Los resultados de las elecciones locales y autonómicas que celebramos hace un año me han hecho reflexionar y tomar decisiones. El trabajo en el Consejo de Europa es apasionante y muy necesario, pero entiendo que a hora debo centrarme más en mi ciudad, Vila-real, en su defensa y en la reivindicación ante las demás instituciones, en intentar aprovechar más y mejor los fondos europeos para seguir avanzando. En impulsar un nuevo proyecto para la nueva Vila-real del siglo XXI que afronte esta década con garantías de crecimiento y de progreso.

Una Europa mejor para un Vila-real mejor

Quiero, por último, agradecer el apoyo de mi partido, el PSOE, que me ha permitido desempeñar en estos tres años un cargo de tanta responsabilidad. A mis compañeros de la delegación española, con los que he trabajado formando equipo con independencia de las ideas políticas, poniendo a nuestro país, España, por delante, y contribuyendo, de esta manera, a construir un mundo mejor. También a la secretaria de la delegación, Mercedes Sánchez, cuya colaboración ha sido fundamental, y a los dos embajadores permanentes de España ante el Consejo de Europa con los que tuve el honor de coincidir durante mi presidencia, Manuel Montobbio y Juan Ignacio Morro Villacián. Ha sido un auténtico orgullo trabajar con todos ellos y representar a España y a Vila-real en un organismo internacional de esta envergadura, contribuyendo a poner nuestro granito de arena a una Europa donde los principios democráticos, la paz y la solidaridad entre los pueblos se impongan. Una Europa mejor para una nueva Vila-real del siglo XXI mejor.

Alcalde de Vila-real