Atención propietarios de viviendas: te pueden devolver miles de euros

Poseer una vivienda en la actualidad a menudo implica seguir pagando la hipoteca. Las hipotecas conllevan numerosos gastos adicionales además de los intereses del préstamo, como los costos de notaría y gestoría. La inflación que ha afectado a España en los últimos años no facilita la situación para quienes tienen una hipoteca, ya que el aumento de los tipos de interés variable ha agravado el problema.

En algunos casos, personas y familias han tenido que desembolsar hasta 200 o 300 euros más por sus hipotecas en los últimos meses. La buena noticia es que quienes poseen una vivienda, ya sea que la hipoteca esté totalmente pagada o no, pueden reclamar algunos gastos que no les corresponden.

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¿Quién podrá reclamar?

En este escenario complicado para los propietarios de viviendas, especialmente aquellos que han visto aumentar significativamente sus pagos hipotecarios, es justo destacar que hay gastos que no deberían haber asumido y que pueden recuperar. Esto es posible gracias a una reciente decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que en abril amplió los plazos para reclamar ciertos gastos hipotecarios que no deberían haber sido cargados a los compradores.

Estos gastos incluyen los de notaría, gestoría y tasación. Estos costos corresponden a los bancos, no a los clientes. En algunos casos, las sumas recuperables pueden oscilar entre 1.500 y 3.000 euros. Los propietarios que pueden reclamar estos gastos son aquellos con hipotecas firmadas antes de junio de 2019, independientemente de si la hipoteca está totalmente pagada o no, siempre y cuando el contrato se haya firmado en ese año o antes.

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Cómo reclamar los gastos

Además de haber firmado una hipoteca en ese período y haber asumido esos gastos, hay otra condición que deben cumplir los propietarios que deseen reclamar. Es necesario tener el contrato de la hipoteca y la cláusula impuesta sin negociación que les obligue a asumir todos los gastos hipotecarios.

De esta manera, se puede demostrar que se ha sido víctima de una cláusula abusiva por parte de los bancos y cajas. Para presentar la reclamación, se debe contar con estos documentos y con las facturas o justificantes de pago que prueben que se han pagado estos gastos indebidos.

El primer paso, una vez reunida toda la documentación, es presentar una reclamación al banco, completando un formulario específico con los datos personales y el motivo de la queja. Si el banco no responde en un plazo de dos meses, se puede recurrir al Banco de España e incluso llevar el caso a los tribunales.