Hasta la Comandancia envió un escrito para presionar a la compañía

Familiares de guardias civiles estallan contra el mal estado de las casas cuartel de Burriana: "Estamos peor que los detenidos"

Están sin aire acondicionado desde marzo y, pese a las reiteradas peticiones para que la empresa lo instale, no tendrán hasta septiembre

Algunos de los desperfectos que presentan las viviendas de la casa cuartel de Burriana.

Algunos de los desperfectos que presentan las viviendas de la casa cuartel de Burriana. / Mediterráneo

Malestar entre los inquilinos de uno de los bloques de pisos de la calle Capitán Cortés, en Burriana. No se trata de unas molestias vecinales sin más al uso, puesto que la particularidad de este caso es que son familiares de guardias civiles los que se quejan del mal estado de las viviendas del cuartel.

Su principal descontento es que los 21 pisos de uno de los edificios que da cobijo a agentes de la Benemérita y sus allegados no disponen de aire acondicionado. Una de las afectadas, la mujer de uno de los agentes del instituto armado que vive ahí, se puso en contacto con Mediterráneo para denunciar que están sin aire desde marzo y que desde la empresa les han trasladado que hasta septiembre no lo activarán, a pesar de sus reiteradas peticiones a la adjudicataria. En el bloque viven unas 60 personas.

Foto del bloque de viviendas del cuartel de la Guardia Civil de Burriana cuyos inquilinos denuncian que están sin aire acondicionado.

Foto del bloque de viviendas del cuartel de la Guardia Civil de Burriana cuyos inquilinos denuncian que están sin aire acondicionado. / Mediterráneo

Embarazadas, bebés y niños

«En esta finca hay mujeres embarazadas, bebés y niños pequeños», por lo que, si en condiciones normales la situación ya sería complicada a la hora de combatir las altas temperaturas del verano, «ahora el problema se acentúa», lamenta.

«Lo peor de todo», recrimina, es que la instalación y las canalizaciones están hechas, de ahí el malestar de no poder contar con el sistema de refrigeración. Según su testimonio, la empresa no quiere instalarlo ahora porque, si hubiera algún fallo o cortocircuito, tendrían que «renovar toda la instalación desde cero» y «lo único que quieren es ahorrar dinero»: «Los que vivimos no importamos».

Más fotos aportadas por los vecinos.

Más fotos aportadas por los vecinos. / Mediterráneo

«Siempre que nos quejamos y les pedimos que lo instalen, desde la compañía nos dicen que no protestemos y que aún deberíamos dar gracias por vivir gratis», expone. «Nos tratan como si fuéramos basura. Los detenidos en el cuartel están mejor que nosotros, seguro que duermen fresquitos», dice.

Tal es el nivel de enfado que hasta la propia Comandancia de la Guardia Civil de Castellón redactó un escrito dirigido a la empresa para presionar y exigirle celeridad para solucionar la incidencia, ante las dificultades de convivir con temperaturas muy elevadas en verano. «Pero la compañía hace caso omiso y sigue sin soluciones», lamenta esta vecina afectada.

Cables colgando

Además de estar sin aire, los inquilinos critican que las viviendas están plagadas de «cables colgando que la empresa no quita», tanto en el interior de los pisos como en la fachada; que el patio de luces es «un peligro» y que hay otros conductos y canalizaciones a medias, a la espera de que los operarios rematen el trabajo. «Hasta el punto de que no taparon los agujeros del tejado, empezó a llover y nos empezó a entrar todo el agua en las casas», recriminan. Y cuando algunos vecinos se duchan, «cae agua al pasillo por los agujeros».

Las obras que la constructora ha realizado en este primer bloque (ahora van por el segundo) están financiadas por el Ministerio del Interior y la inversión asciende a 2,3 millones, de los que 2,1 proceden de fondos Next Generation. 

El presupuesto total de las obras supera los 2,3 millones.

El presupuesto total de las obras supera los 2,3 millones. / Mediterráneo