Formación a la última para superar los retos de la Administración actual

La óptima cualificación de los directivos, gestores y asesores de las administraciones públicas y de los actores que trabajan con las mismas es un aspecto crucial para garantizar la calidad de los servicios públicos. Por ello, el Grado en Gestión y Administración Pública que ofrece la UJI aporta "una formación estrechamente vinculada a la realidad de la Administración en el siglo XXI, que debe adaptarse y responder a nuevas exigencias y retos como son la globalización, la eficiencia en la actuación y la implementación de las nuevas tecnologías en las relaciones públicas y público-privadas», como explica la vicedecana responsable del grado, Marta Oller. El objetivo final es "formar a profesionales especializados en actividades de dirección, gestión y asesoramiento con proyección laboral, tanto en el ámbito del sector público como en el ámbito privado, que tenga un contacto continuo con las administraciones públicas, debido al conocimiento especializados que de estas tiene", señala.

El diseño del grado pivota sobre grupos reducidos, lo que permite un alto dinamismo en una docencia que apuesta por que el estudiantado complemente su formación teórica (a través de la necesaria docencia en el aula) con actividades prácticas, "principalmente a través de salidas que permiten conocer de cerca el funcionamiento de la Administración Pública, y que posibilitan un conocimiento real y esencial para el futuro desarrollo profesional", argumenta Oller. En este sentido, cabe destacar las visitas que los alumnos realizan a administraciones públicas como la Diputación Provincial o les Corts Valencianes; la posibilidad de realizar prácticas externas en gestorías administrativas o consultorías, en el caso del sector privado; así como la actualización que ofrece la participación habitual de expertos externos en las aulas, abordando cuestiones prácticas relativas a la gestión pública. El resultado es un grado de empleabilidad por encima de la media, el 0,82% frente al 0,79%, según el informe específico de la Fundación BBVA del año 2023.

Testimonio

Un ejemplo de estos resultados es el caso de Nicolás Ospina, egresado en 2022, quien señala que el grado es "muy práctico en la vida laboral y para el sector privado". Desde su puesto de trabajo en el área jurídica de la empresa Elektrosol, al que accedió tras realizar sus prácticas en la misma, recalca que la carrera plantea una formación "transversal, generando a su alumnado una oportunidad de obtener conocimientos jurídicos y también de contabilidad, estadística, etc. Unos contenidos muy útiles". Asimismo, Ospina subraya un "muy buen trato de los profesores, que portaban una vertiente muy práctica del ejercicio de diferentes profesiones, lo que nos llevaba más allá de la teoría". En su labor profesional destaca que sigue aplicando "los conocimientos adquiridos en la UJI porque preparamos todo tipo de documentación relacionada con las administraciones públicas"