Aunque a la sexta reunión aún no fue la vencida este lunes y el pacto entre el PSPV-PSOE y Compromís en Vila-real deberá esperar unos pocos días más, el acuerdo de gobierno está más cerca que nunca. La previsión es que, si las respectivas asambleas de ambos partidos así lo ratifican, el bipartito pueda ser ya una realidad dentro de un plazo de unos 15 días.

La intención es que el anuncio del pacto coincida en el tiempo con la presentación y aprobación del presupuesto, atado y consensuado entre las dos formaciones desde hace semanas.

La nueva toma de contacto sirvió para acabar de cerrar el decálogo de acciones y medidas que regirán las bases del futuro acuerdo y darse un periodo de 15 días para trasladar los pormenores del pacto a las asambleas de cada partido.

El alcalde, José Benlloch (PSPV), explica a Mediterráneo que esta fase de la negociación se ha dilatado más en el tiempo porque hasta ahora las dos formaciones estaban «enfrascadas y concentradas en las elecciones del Parlamento Europeo», pero ahora las agendas están ya más despejadas. «En los próximos días tendrá lugar la ejecutiva para someter los detalles del pacto de gobierno a la militancia, tal como marcan los estatutos», afirma el primer edil.

A tenor de los plazos, Benlloch recalca que el objetivo es que la llegada del presupuesto (algo que el PSPV ha tenido muy cuesta arriba hasta ahora al gobernar en minoría) traiga consigo la oficialidad de la alianza del bipartito, ya que cree que es «lógico» que las nuevas cuentas sean fruto del futuro ampliado equipo de gobierno.

¿De qué hablaron ayer?

Este lunes como tal, según señala la portavoz local de Compromís, Maria Fajardo, no hubo avances significativos, aunque el encuentro sirvió para «matizar y dejar atado ese decálogo», con los pilares que sustentarían el futuro pacto, que la coalición someterá también a su vez a su militancia. Uno de los asuntos que pulieron fue el del portal de la transparencia, donde abordaron la importancia de tener en cuenta algunos preceptos que marca el código ético de la Agencia Valenciana Antifraude.

«Son reuniones largas porque se basan en un diálogo que era importante que retomáramos las dos fuerzas. Venimos de donde venimos. Nosotros hicimos una oposición vehemente para defender nuestra ideología y postura, mientras que a ellos les ha costado mucho asimilar que habían perdido la mayoría absoluta», confiesa Fajardo, que define que se encuentran en «un proceso de reconciliación y de reparación» entre los dos partidos. «Eso se basa en el diálogo y creo que las horas que invertimos reunidos son muy importantes para ello», añade la edila.

¿Y el reparto de concejalías?

Si bien Fajardo se muestra reacia a hablar de las concejalías concretas que podría asumir Compromís, las áreas que estarían en juego y serían de su agrado serían Servicios Públicos, Medio Ambiente, Transparencia (sería de nueva creación), Agricultura y Normalització Lingüística. «De las áreas de gobierno no sabemos nada aún, pero desde Compromís vamos a máximos como en cualquier negociación, ya que el punto de partida es el mismo que el del día siguiente de las elecciones y todo el mundo sabe que hay áreas más trascendentes que otras en cuanto al presupuesto que gestionan o las competencias que llevan a cabo», reitera.