'Oasis climáticos' en la Vall d'Uixó: refugio y compañía contra el calor

El Ministerio de Sanidad dio a conocer recientemente el plan nacional de actuaciones preventivas ante episodios de calor, donde establecen que el umbral de temperatura máxima a partir del cual consideran que puede haber un impacto nocivo para la salud, en la provincia de Castellón, es de 32,5 grados. Las previsiones meteorológicas apuntan a que este será un verano más seco y caluroso que el pasado, cuando ya se alcanzaron registros térmicos históricos.

La evidencia está llamando ya a la puerta. Después de un fin de semana tórrido, la Aemet anuncia para la Vall d’Uixó temperaturas que alcanzarán los 31 grados a la sombra a principios de la próxima semana. Un panorama al que no todos los ciudadanos pueden hacer frente de la misma forma, porque hay quien no puede permitirse ni estar de vacaciones en la playa, ni acondicionar su vivienda.

Un lugar donde guarecerse

Ante esta realidad, el Ayuntamiento de la Vall ha decidido crear lo que han denominado como oasis climáticos. La solución es sencilla. Cinco centros sociales de la ciudad -de titularidad pública- permanecerán abiertos para que «personas que no se pueden permitir tener aire acondicionado en casa» encuentren un lugar donde guarecerse del estrés térmico.

Así lo explicó este miércoles el concejal de Servicios Sociales, Jorge Marqués, que destacó la implicación de la comisión de personas mayores, integrada por las asociaciones de jubilados del municipio. Sobre esta parte del proyecto, el edil hizo hincapié en que «hacen un gran trabajo desinteresado a favor de su vecindario y de los barrios».

Los edificios que estarán abiertos este verano como refugios contra el calor serán los de Maestro Rodrigo, Santiago Apóstol, San Antonio, Carbonaire y Les Llimeres, cada uno en un horario, pero han intentado que permanezcan abiertos en las horas centrales del día, cuando el sol aprieta más.

"Crear espacios de interacción"

Marqués indica que estas dependencias municipales no se limitarán a estar abiertas para dejar entrar a cualquier persona que lo desee. A disposición de los usuarios habrá fuentes de agua potable fresca, juegos de mesa, manualidades, libros y pasatiempos.

El propósito es mitigar los efectos del calor y «crear espacios de interacción y socialización». El concejal remarca el hecho de que con este tipo de iniciativas, de manera colectiva, contribuyen a «crear comunidad y tejer una red de apoyo», y al Ayuntamiento no se le escapa que entre quienes más sufren estos episodios de calor están los mayores, que encontrarán alivio, pero lo que es más importante, compañía para sobrellevar las exigencias estivales.