Sanitat aliviará la carga médica con otro reparto de tareas en los ambulatorios
La Conselleria creará jefes de servicio y sección que participarán en las reuniones con el resto de especialistas
Una enfermera expide una receta en un centro de salud privado / Álex Domínguez
Lluís Pérez
Aliviar la carga burocrática diaria y mejorar la satisfacción de los médicos de cabecera. Esos son dos de los objetivos del decreto sobre Atención Primaria que la conselleria de Sanitat está ultimando, a la espera de los informes del Consell Jurídic Consultiu y de la Abogacía de la Generalitat Valenciana. El conseller Marciano Gómez lo ha apuntado en los últimos meses, pero este miércoles confirmó en un desayuno informativo en Europa Press que el decreto está casi listo para su aprobación, aunque los sindicatos desconocen su contenido. Una de sus prioridades es descargar la carga laboral de los facultativos para centrarse en la atención a los pacientes así como el resto de cuestiones médicas.
Gómez avanzó algunos de sus puntos clave. Uno de ellos será una nueva distribución de competencias, diferente a la actual, en la que cada categoría profesional asumirá mayor responsabilidad y autonomía. «Se pretende evitar que cualquier problema que entre al centro de salud acabe llegando al médico», comentó. En este sentido, Sanitat busca un modelo similar al de los hospitales, en el que el paciente se dirija a un departamento o profesional concreto dependiendo de la atención requerida. Por ejemplo, un administrativo podrá encargarse de la expedición de certificados, el personal de Enfermería asumir intervenciones de poca complejidad o que las recetas se expidan en un punto concreto y no en la consulta del médico.
Más prestigio
Otra de las finalidades es aumentar el prestigio de Medicina Familiar, cuya demanda en las convocatorias del MIR suele ser más baja. Las razones esgrimidas son la alta carga asistencial, con más de 50 pacientes diarios, y su falta de reconocimiento como especialistas, como sí que ocurre en otras disciplinas sean o no quirúrgicas como Dermatología o Cardiología, por ejemplo. En la lista de motivos, se suele incluir también la diferencia retributiva con otras especialidades (suele ser menor), pero los expertos descartan que sea una razón de peso por sí sola para hacer la especialidad más atractiva.
Médicos de familia
En su primer año al frente de la conselleria, Gómez ha remarcado varias veces la especialización de los médicos de familia. De hecho, cursan una residencia de cuatro años como el 70 % de las especialidades. Por ello, el decreto prevé una nueva jerarquización en los ambulatorios con la figura de jefes de servicio y sección, similar a la de las áreas hospitalarias, en lugar del coordinador actual. Su elección será «con criterios de igualdad, mérito y capacidad». Estos participarán en las reuniones de coordinación de cada departamento, «hablándole de tú a tú al resto de especialistas», defendió Gómez.
Otra de las acciones que hay previstas es la dotación de 400 ecógrafos en AP con inteligencia artificial y la inclusión de la asignatura de «Medicina Familiar» en el currículo de todas las universidades valencianas.
La incidencia de covid se duplica
La tasa de coronavirus se ha duplicado en la Comunitat en dos semanas. Con 221,4 casos por cada 100.000 habitantes, roza su máximo en año y medio con cifras similares a enero. Hace dos semanas se situó en 95,5 y, hace siete días, en 206,3. En junio del pasado año, era seis veces inferior (37).
Desde Sanitat explican que el aumento no supone una mayor carga en Urgencias porque la mayoría de casos son leves. Hay 2,6 pacientes cada 100.000 personas.
Cae de nuevo la demora para cirugías urgentes
El número de pacientes a la espera de una cirugía de urgencia se ha reducido en la Comunitat Valenciana durante el primer semestre del año. Lo anticipó el conseller Marciano Gómez en su intervención de este miércoles, a la espera de conocer los datos oficiales totales. El dato consolida la tendencia registrada durante el segundo trimestre del año 2023, cuando la incidencia de este tipo de pacientes —son los que están pendientes de una intervención que no admite una demora superior a 30 días por el riesgo vital de sus patologías— se redujo un 52 %, al pasar de los 2.967 a los 1.411 enfermos; ahora serían menos, aunque Gómez no concretó cuánto siguen esperando.
A pesar de ser datos positivos, Gómez recalcó que quiere alejarse de «la lucha atroz» entre autonomías que se genera al final de cada semestre porque «detrás de cada dato, hay una persona». Insistió en diferenciar a los pacientes por la prioridad de sus intervenciones porque «no es lo mismo una catarata que un cáncer». De hecho, los datos del último balance publicado reflejan esta priorización del actual Consell, ya que la reducción se produjo en pacientes con esperas de hasta 180 días, pero aumentó en las de los más de 180 en cerca de 5.000 personas. Esto provocó que el último balance dejara inmóvil la demora media estructural en la sanitat valenciana, que a fecha de 31 de diciembre era de 88 días.
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